LAV de Levante. Tramo: San Isidro-Orihuela
Viaducto de Callosa-Cox, 743 m de longitud, luz máxima de 28 m y ancho variable entre 14 y 34,4 m. Viaducto de Redován: 590 m de longitud y 37 m de luz. Cuentan con dispositivos antisísmicos capaces de resistir el frenado y que disipan energía durante el evento sísmico. Ejecutados mediante vigas prefabricadas pretensadas conectadas in situ
- Fecha: 2011-2015
- Estado: finalizado
- Localidad: Alicante, España
Desarrollo del proyecto constructivo y asistencia técnica a la obra de diversas estructuras contenidas en el tramo de Alta Velocidad San Isidro-Orihuela, caracterizado principalmente por tener una de las mayores actividades sísmicas de España, tomando como aceleración de cálculo horizonal 0,27 g, y por situarse sobre un terreno de gran deformabilidad y escasa capacidad portante.
El viaducto más singular es el de Callosa-Cox, con un tablero de 743 m de longitud, luces máximas del orden de los 28 m y ancho variable entre 14 y 34,4 m. La estructura se resuelve por medio de una sección formada por un número variable de vigas prefabricadas (entre dos y cuatro). Adicionalmente, en la sección de 34,4 m ha sido necesario incluir jabalcones metálicos para completar el ancho. A nivel longitudinal, la tipología es hiperestática, ya que las vigas se tesan con barras entre sí y en la losa superior se dispone un postesado adicional. En el estribo fijo se dispone una serie de dispositivos antisísmicos, capaces de resistir el frenado, y que disipan energía durante el evento sísmico.
El viaducto de Redován tiene una longitud de 590 m y luces tipo del orden de los 37 m. También se resuelve por medio de vigas prefabricadas hiperestáticas con dispositivos antisísmicos situados en el estribo fijo.
Se proyectan cuatro pasos superiores de gran longitud y con tablero de vigas prefabricadas hiperestáticas monocajón o artesas.